viernes, 29 de agosto de 2014

El Misterioso Mr. Tiger Tateishi

Cuando no había Internet ni ninguna de esas maquinolas, encontrábamos dibujantes que nos partían la cabeza perdidos en libros de ilustración, muchas veces sin saber muy bien de quién se trataba ni dónde encontrar mucho más material. A Tiger Tateishi y sus extrañas historietas con esqueletitos lo descubrimos en el libro "The Beatles Illustrated Lyrics 2", donde ilustraba -es una manera de decir, ya que el dibujo no tenía la menor relación con el texto- algunas letras de los 4 de Liverpool. Puedo decir con orgullo que hoy, con Internet y todo, no existe prácticamente ni medio gramo más de este misterioso artista.

Según el blog francés "Chronophonix", Tateishi (1941-1998) era un dibujante japonés -gracias por el dato- que hizo manga, ilustraciones y trabajó en un estudio de arquitectura. Fin de la información. Como dato adicional, fue expuesto por el galerista Alexandre Iolas, que trabajó con Magritte, Max Ernst y otros, cosa que maldita sea si me importa, soy dibujante, no pintor de caballete.

A continuación, las historietas de "The Beatles Illustrated Lyrics 2" y alguna que otra cosa encontrada en Internet del misterioso Mr. Tateishi.























jueves, 28 de agosto de 2014

LA CURIOSITÉ: Andrés Cascioli, Historietista

Cascioli en su no tan conocida faceta historietística. Luego no hizo más porque se dedicó a unas cositas sin importancia, como dibujar cientos de caricaturas políticas o fundar un imperio editorial. Una pena, porque prometía el muchacho. (Chaupinela n° 9, 1975)





En este link puede verse data sobre más cosas de Cascioli haciendo historietas, en un estilo más serio.

martes, 26 de agosto de 2014

POLÉMICA: Dibujantes vs. Humoristas (Crist)

“Antes, en la época en que yo admiraba a Ferro, a Quinterno, a Toño Gallo, a Blotta padre, los grandes dibujantes, ninguno se definía como humorista. Todos eran dibujantes. Pasa que hubo una época en que se intelectualizaba todo, entonces empezaron a aparecer los críticos que nos explicaban lo que hacíamos y que nos empezaron a llamar humoristas. Y nos gustó, nos quedó. Pero yo no me la creo; somos dibujantes” (del libro “Las historietas de Crist”, de editorial Duendes)







¡Y claro, siendo Crist cualquiera se puede decir “dibujante”! Lo interesante es que hoy decirse “humorista” es un poquito mersa. Quiero decir, suena muchísimo mejor decirse “dibujante”, pero parece que hubo una época donde ser humorista era re cool.

¿Y tú, joven dibujante o humorista? ¿Cómo te llamas?

(Agradecimiento a la editorial Duendes por haber publicado este libro. Y un saludo a la mamá de la editorial Duendes por el interesante dispositivo “anti-escaneo”, que te destruye el libro en pedazos en cuanto lo abrís un poquito de más)

lunes, 25 de agosto de 2014

"El Valiente Tambor", de V. Losin



"El Valiente Tambor" es una historia soviética del autor S. Moguilévskaya, que a mí me recordó bastanta a "El pequeño tambor sardo", del libro "Corazón". Básicamente un relato donde se nos enseña el valor del sacrificio y el coraje a través de la historia de un niño que se anota en el ejército, toca el tambor y termina amputado o, como en este caso, aniquilado.



Esta edición de "Editoral Progreso" (según dice, impresa en la URSS) contiene excelentes ilustraciones de V. Losin, dibujante del que no he encontrado mayores referencias pero calculo que sería ruso. Vamos a las imágenes, Sr. director:

Arranca con la clásica situación de un niño sin mayores problemas que descubre un tambor, el cual le cuenta su historia:



El tambor le relata los heroicos tiempos de la Revolución.



Lárik, un niño de 13 años, quiere sumarse a las ilas del Ejército Rojo pero no lo dejan por su juventud. Pero agarra un tambor y, de algún modo, convence a un oficial que lo mira de un modo a mi entender un poco turbio.











Luego de acompañar al ejército e infundir valor en el corazón de los soldados a golpes de tambor, pide licencia para ver a su familia.



...Para descubrir un pelotón del Enemigo, que acechaba en el bosque para caerle de sorpresa a sus camaradas.



Lárik se poone a tocar el tambor como un enajenado para dar aviso, y por supuesto los malandras del equipo contrario le caen encima.



Y agarran y lo matan.





¡Que el ejemplo de valor y sacrificio de Lárik nos inspire a todos! Fin.